Pues bien. Aquí tenéis una muestra.
Parece increíble que esta cesta blanca, tan elegante, haya sido en algún momento un montón de hojas de periódico, ¿verdad?
Elaborarlas es muy sencillo, y aunque puede llevar algo de tiempo, el resultado merece la pena.
Como veis, se trata de hacer tiras de papel y entrelazarlas. Así de sencillo.
Y las posibilidades son inmensas. Basta con modificar el ancho de las tiras, y añadir más o menos cantidad para decidir el tamaño.
Pintada de un azul claro, combinará perfectamente en la habitación de vuestros pequeños como caja de almacenaje de juguetes.
Con un tono blanco, os servirá para guardar todas esas cremas que tenéis almacenadas en el baño.
Y funcionará perfectamente como centro de mesa, decorada con betún de judea.
Y no os olvidéis del remolque de nuestro camión de pañales.
¡Hasta la próxima!